Un autónomo es un valiente y, más en estos tiempos en los que el Gobierno persigue que aquellos que ganen por debajo del tramo entre 900 y 1.125,90 euros paguen una aportación inferior a la actual y el resto paguen más.
La realidad es que, en España, uno de cada tres autónomos cotiza por una base superior al salario mínimo y, por tanto, la cuota subirá para la mitad de los trabajadores. En dos años,1,8 millones sufrirán un alza del 40% y 1,4 millones tendrán un rebaja de apenas el 10%.
Así las cosas, un autónomo en España pagará el triple que en el Reino Unido y el doble que en Alemania y Francia. Levantar la persiana en nuestro país es más caro que hacerlo en el resto de la Unión Europea. Una verdadera heroicidad.